Presentación
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ha publicado que alrededor de 100 especies de cultivos, proporcionan el 90% del suministro de alimentos para 146 países. De estos cultivos, el 71% son polinizados por abejas, con lo cual se consideran el grupo de polinizadores más importantes, tanto de plantas silvestres como de cultivos en el mundo.
A pesar de su importancia, muchas especies de polinizadores, principalmente las abejas están amenazadas, debido al cambio de uso de suelo, la industrialización de la agricultura, el uso desmedido de insecticidas, la presencia de especies exóticas, plagas o enfermedades y a los efectos del cambio climático, entre otros.
Lo anterior, tiene más relevancia en las diferentes agendas locales, nacionales e internacionales, puesto que los diferentes sectores de la sociedad empiezan a reconocer su valiosa contribución para la supervivencia humana y de los ecosistemas. Colombia es un país donde la trama de la vida se formó a través de una gran diversidad de especies.
Para que toda esta biodiversidad continúe cumpliendo su función en el país, es necesario que procesos vitales como la polinización, sigan ocurriendo de forma natural.
La iniciativa nacional de polinizadores tiene como objetivo principal: promover y orientar la gestión integral de los polinizadores para asegurar el servicio eco-sistémico de la polinización en Colombia, a través de la generación de conocimiento, valoración del servicio, conservación, restauración y monitoreo de los hábitats de los polinizadores, el fortalecimiento de capacidades, participación e incorporación en la toma de decisiones, considerando las dimensiones político, normativa, social, cultural y técnico-científica.
Nuestra Misión
Santiago de Cali, está comprometida y articulada con esta iniciativa y por tal razón se ha gestado el actual Convenio interadministrativo CVC 0134 de 2020 entre la CVC y la FUNDACION ENTORNO, cuyo objetivo es: «Aunar esfuerzos técnicos, humanos y recursos económicos para implementar acciones de manejo del arbolado urbano en riesgo y mejorar las condiciones ambientales en zonas verdes públicas de Santiago de Cali».
Igualmente, se mantendrán, asegurarán y restaurarán hábitats urbanos para los polinizadores, a través de buenas prácticas y de la promoción de la conservación de ecosistemas naturales, en áreas urbanas con la participación de las comunidades e instituciones sociales locales.
Mapas de Calor de Cali y coberturas vegetales
Cali con 2,65 metros cuadrados en áreas verdes por habitante en el 2018, debe seguir trabajando para llegar al estándar propuesto por la ONU de 15 m2. Así mismo, la OMS establece un estándar de tres habitantes por cada árbol urbano y la ciudad cuenta con 296.500 árboles. Igualmente hay retos importantes con los barrios del oriente y el centro de la capital del Valle, quienes están inmersos en las islas de calor e índices de un défecit arbóreo, considerando los individuos arbóreos que habría que reemplazar por problemas fitosanitarios, con conflictos con la infraestructura, inclinaciones o vejez, que podrían sobrepasar el 40% del arbolado actual, según información del Plan de Silvicultura 2019. De aquí la importancia de los Bosques Urbanos porque, además de rescatar las especies del bosque seco tropical, amenazadas a nivel mundial, permitirán reducir las islas de calor que sobrepasan el 70 por ciento en la ciudad, debido a la ausencia de coberturas vegetales. También harán posible proveer recursos a la fauna, como alimento, refugio y sitios de reproducción, sirviendo también como sustrato para el hospedaje y desarrollo de una gran diversidad de plantas epifitas, evitando así la desaparición de hábitats y especies.
Nuestros Bosques Urbanos
Un ecosistema urbano, representa un conjunto de elementos integrados: personas, animales y plantas y además seres inertes: edificios, vías, andenes, etcétera. Cada uno cumple un papel especifico y fundamental con funciones distintas para su funcionamiento y en esta estrecha interrelación, las poblaciones en el desarrollo de sus actividades antrópicas desequilibran el componente más vulnerable: la naturaleza.
Surge la necesidad, en consecuencia, de ver la ciudad con un enfoque ecológico, acentuando las relaciones entre la población y su espacio vital, con el fin de orientar, a través de un enfoque normativo y educativo, el funcionamiento de las distintas actividades que se desarrollan en esta forma especial de hábitat.
Como propósito central de estas tareas se busca construir un ecosistema urbano para el hombre, donde la naturaleza y la vida cotidiana se interrelacionen en total armonía; donde los parques, los humedales, los ríos y quebradas sean espacios que genere pertenencia en los ciudadanos y en donde la vivencia de la ciudad sea más amable para todos.
Te gustaría apadrinar nuestros bosques urbanos?
Objetivo: apoyar los proyectos de embellecimiento en parques y zonas verdes propuestos por el sector privado y la comunidad, brindando asistencia técnica para el cuidado y la siembra de flora urbana. El apadrinamiento de zonas verdes consiste en invertir recursos económicos, humanos y naturales para el mantenimiento y mejoramiento del paisaje urbano en Santiago de Cali.