La triple crisis planetaria: cambio climático, pérdida de biodiversidad y contaminación constituye un hecho real y tangible. Los impactos sobre los ecosistemas, las grandes migraciones producidas por sequias e inundaciones, los incendios forestales, las temperaturas
extremas sobre el suelo y los océanos, la contaminación de agua, suelo y aire, etc., son fenómenos que se manifiestan con nuevos picos, con proyecciones alarmantes e impactos desproporcionados,
los cuales han sido presentados a los gobiernos del mundo por el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, IPCC y la Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas IPBES, entre otros órganos científicos y técnicos.
